El 8 de septiembre se celebra el día del cooperante internacional y desde Mundukide nos gustaría aprovechar el día para homenajear la aportación de los cooperantes.
Siendo la Fundación Mundukide una organización no gubernamental para el desarrollo, trabajamos con colectivos que viven en situaciones de gran necesidad. Y los cooperantes son un elemento fundamental de nuestro trabajo.
Por un lado, la cooperante, viviendo sobre el terreno y trabajando con sus habitantes en el día a día, nos ayuda a entender mejor la situación del lugar. Sus necesidades y deseos, capacidades y limitaciones; puntos de vista que serían difíciles de asimilar sin estar allí…
Y lo mismo en la otra dirección: el cooperante también les informa de nuestras capacidades y limitaciones.
Hay que tener en cuenta que la cooperación para el desarrollo pone en contacto a personas y asociaciones que viven situaciones muy diferentes. Es muy enriquecedor. Pero no es fácil la colaboración entre quienes tienen puntos de partida tan diferentes. Y para que eso sea posible el cooperante hace una labor de puente vital.
Por otro lado, también hay que tener en cuenta la aportación del cooperante en el lugar.
De hecho, la innovación y el intercambio de experiencias son un elemento fundamental en la cooperación al desarrollo. El cooperante no manda. No va a decir a dar órdenes o directrices. Pero a través puede aportar nuevos puntos de vista, la oportunidad de aprender nuevas técnicas o conozcer experiencias diferentes. ¿Cómo cambiar las cosas sin nuevos puntos de vista, conocimientos y técnicas? Esta innovación es fundamental en los procesos de cambio que se pretenden impulsar en la cooperación al desarrollo.
Y por último, hay que destacar que ser cooperante no es una cosa fácil: Dejar a familiares y amigos para integrarse en una realidad tan diferente suele ser un gran reto. Y donde hay tanta necesidad la vida no suele ser ni fácil ni agradable.
Pero en Mundukide, los proyectos que han dado mejores resultados, todos han tenido un elemento en común: un o una buena cooperante.
La experiencia nos dice que son un elemento imprescindible y fundamental en la cooperación al desarrollo. Y por todo ello, queremos trasladarles nuestro agradecimiento.