Festival de danza y música por Mozambique
Fecha 20 de julio, miércoles
Lugar Parque Monterron, Arrasate
Hora 19:30
Precio 10€
Organizadores Harreman y Mundukide
El 20 de julio celebramos en Arrasate el Festival solidario por Mozanbique con la expectacular actuación del grupo de música y danza ugandés “Ugandan Sticks” y la colaboración de TTakun txalaparta elkartea de Arrasate y Jaiki elkartea de Aretxabaleta.
Uganda STICKS, bailando con el Alma
Bailan describiendo la tierra, las costumbres, la fe, la alegría, el dolor, la belleza y estallan de alegría con tambores y ritmos ruandeses. Contemporáneo, africano, tribal, bailan a cámara lenta o con ritmos locos. El espectáculo que hacen los Sticks en Uganda es un espectáculo puro, puramente africano, que ha cosechado un gran éxito en todos los lugares donde han actuado. Siete jóvenes criados en el orfanato de Kampala, han realizado cientos de actuaciones en Euskal Herria y España.
Ttakun, el puente intercultural
Según, los y las txalapartaris deTtakun, la txalaparta sirve de puente entre culturas y vienen a demostrarlo.
JAIKI, lenguaje de los sentimientos
Los miembros de Jaiki utilizarán el lenguaje corporal y así comunicar historias, emociones y sentimientos.
Reforzar el compromiso de las y los vecinos de Arrasate y Debagoiena
El objetivo del festival es reforzar el compromiso de las y los vecinos de Arrasate y Debagoiena con el programa de cooperación de Mozambique en el que Harreman y Mundukide llevan colaborando más de veinte años.
El programa “Marrupa” colabora con los y las campesinas de las dos provincias norteñas de Mozambique con el objetivo de lograr que el trabajo del campo les rinda unos ingresos suficientes para mejorar las condiciones de sus vidas.
Hace veinte años el país estaba totalmente destruido y aunque durante estos veinte años ha habido mejoras visibles en infraestructuras, salud, educación y actividad económica, la situación actual continúa siendo de una gran precariedad.
Por ejemplo, en lo que se refiere a la agricultura campesina, si hace veinte años, en el distrito de Marrupa no había ni diez campesinos/as que tuviesen una cosecha de un valor de más de 200 €, ahora son algunos cientos los que consiguen dicho valor. Si hace veinte años ni un cuarto de las familias campesinas tenían una bicicleta, ahora son mayoría y bastantes incluso consiguen tener pequeñas motos.
Creando metodologías innovadoras que se basan en aprovechar las capacidades y conocimientos locales
Hace veinte años el programa comenzó por abrir carreteras rurales, dando crédito a unas cien familias campesinas y enseñando técnicas de riego a otra veinticinco. Hoy en día, participan en el programa más de 10.000 familias que además de los cultivos de subsistencia tradicionales trabajan con las técnicas introducidas por el programa otras 2.000 hectáreas de las que logran un ingreso extra de más de 1 millón de euros.
Para ello, a lo largo de los años el programa ha logrado crear metodologías innovadoras que se basan en aprovechar las capacidades y conocimientos locales, complementados cuando es necesario con lo que pueden aportar los cooperantes.
El programa cuenta con una estrategia clara, basada en crear una variedad de nuevas oportunidades de forma que cada familia se pueda dedicar al cultivo que más le convenga a sus circunstancias concretas, y lo pueda hacer de forma rentable, es decir logrando con su trabajo unos rendimientos suficientes para una vida condigna.
Queda mucho por hacer y todo apoyo es bienvenido
Pero aún queda mucho por hacer. Aun son mayoría las familias que no participan de las nuevas técnicas y cultivos; y aunque unas pocas alcanzan a tener unos ingresos anuales equivalentes a cobrar el salario mínimo (60€/mes), la gran mayoría apenas alcanza a lograr un cuarto de dicho valor.
Si queremos un mundo más estable, con menos sorpresas, menos conflictos y menos luchas, es deseable y deseable minimizar estas desigualdades.
Por todo ello, es necesario continuar trabajando. Y para ello es necesario el apoyo de las y los vecinos de Debagoiena. Sin dicho apoyo, el programa no habría podido tener ni la constancia, ni la flexibilidad que ha tenido en estos veinte años. Es la complementariedad de las contribuciones solidarias y de las subvenciones lo que permite al programa tener suficiente musculo y flexibilidad. Cosas ambas totalmente necesarias para lograr resultados efectivos.
Por todo ello, gracias y esperamos poder continuar contando con vuestro apoyo.