Es muy doloroso ver como varias de las cooperativas de estado de Rio Grande do Sul con las que trabaja Mundukide han quedado bajo el agua a consecuencia de las grandes inundaciones sufridas entre abril y mayo.
En una nota, el movimiento MST considera que «si bien hay un porcentaje de familias que ya han regresado a sus lugares de origen, hay otras familias que ya no quieren regresar, asumiendo su realidad como refugiados climáticos, conscientes de la recurrencia de las inundaciones».
Desde septiembre de 2023, se han producido tres inundaciones en la región. No en vano, en marzo de este año se canceló la tradicional Fiesta Agroecológica de la Cosecha del Arroz , dando paso a un ciclo de debates sobre los impactos de la emergencia climática en la agroecología.
La cosecha, que no se realizó en la ventana agrícola habitual, se realizaría ahora, pero la región ha estado golpeada nuevamente por lo que ya se considera la mayor catástrofe climática en la historia de Rio Grande do Sul. Un cálculo preliminar que suma las pérdidas del MST vinculadas a la cadena productiva de arroz, hortalizas, frutas, ganadería y avicultura asciende a R$ 64 millones.
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